En el balcón suizo

En el balcón suizo

No pudo evitar sonreír al recordar lo que le inspiró ese hombre al principio, arrepentida ahora de haberlo considerado como los vecinos de la región. Se volvió y encontró su mirada. Al mismo tiempo, alzaron los brazos y se saludaron; apagó su cigarrillo y se metió a su casa.